Con el objetivo de continuar avanzando en políticas vinculadas al agregado de valor, el ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela se reunió con el presidente de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), Alfredo Paseyro, para hacer un balance de lo realizado durante el año y analizar la producción y comercialización de semillas con la posibilidad de abrir nuevos mercados a futuro.

Paseyro se mostró complacido por el reconocimiento que la FAO le otorgó a la Comisión Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria (Conabia) como "Centro de Referencia" para la Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados y dijo: "Estuve presente en el reconocimiento y nosotros como empresas de biotecnología no solo estamos involucrados sino que al mismo tiempo estamos orgullosos de este reconocimiento".

En relación a las posibilidades que ofrece el mercado chino, Paseyro admitió que el gigante asiático "abre mercados para todos” y precisó: “En lo que involucra a semillas tenemos grandes expectativas porque además de ser grandes proveedores de soja, el objetivo es extendernos a otros cultivos como el sorgo y el maíz. También queremos ser abastecedores de tecnología y convertirnos en un proveedor estratégico de contraestación".

Casamiquela recordó que ya está aprobado el Protocolo Fitosanitario para la Exportación de maíz y que la firma del Protocolo de Sorgo, cuya negociación técnica ya fue concluida, se realizará durante la próxima visita del ministro a China.

Además de las posibilidades que ofrece China, la Argentina tiene un amplio mercado de contrastación con Estados Unidos y tiene como objetivo continuar desarrollando las potencialidades que ofrece Europa.

ASA nucléa a las principales empresas involucradas en las etapas de la producción de este insumo, desde la investigación, a la multiplicación y la comercialización y tiene como propósito promover la producción de semillas fiscalizadas, garantizando su calidad y pureza.