Spain
January 25, 2025
La agricultura del siglo XXI enfrenta retos fundamentales: garantizar la seguridad alimentaria, mejorar la sostenibilidad y cumplir con un marco legal cada vez más exigente. Dentro de este contexto, el uso de semilla certificada se presenta como una solución indispensable para garantizar cultivos de calidad, trazabilidad y sostenibilidad.
Sin embargo, recurrir a semilla de curso no legal es una práctica que, además de comprometer la calidad del cultivo, constituye una infracción grave penada por la ley. En este artículo, explicamos por qué la semilla certificada es la mejor opción, qué implica el grano acondicionado y cómo se aplica la excepción del agricultor.
Semilla certificada: la elección más segura y legal
La semilla certificada es el resultado de un proceso controlado que asegura:
- Calidad y rendimiento superior. Las semillas se someten a controles estrictos para garantizar su pureza genética, sanidad y homogeneidad.
- Cumplimiento normativo. Su producción y comercialización cumplen con las exigencias de las normativas nacionales y europeas.
- Innovación y sostenibilidad. Permite el acceso a variedades mejoradas y adaptadas a los desafíos climáticos y productivos actuales.
Otras Opciones legales: acondicionamiento de grano y acogerse a la excepción del agricultor
La legislación española y europea permite, además del uso de semilla certificada, dos opciones específicas bajo ciertas condiciones:
Grano acondicionado
El grano acondicionado es el resultado de procesar y limpiar grano en almacenes autorizados dados de alta en el Registro de autorizaciones de servicio de acondicionamiento de grano y con la autorización en vigor, y sin que el almacén acondicionador adquiera derecho sobre el grano. Este proceso está permitido si:
- Se acondiciona cumpliendo estándares mínimos de calidad.
- Se respeta el pago de cánones si la variedad está protegida por derechos de obtentor.
Excepción del agricultor
La excepción del agricultor, regulada por el Reglamento (CE) nº 2100/94, permite a pequeños agricultores reutilizar semilla cosechada sin necesidad de pagar regalías adicionales, siempre que cumplan las siguientes condiciones:
- Solo aplica a ciertas especies y variedades.
- Está destinada exclusivamente al uso propio del agricultor.
- No se permite su comercialización como semilla.
Estas alternativas pueden resultar más económicas a corto plazo, pero ninguna ofrece los estándares de calidad y garantía que proporciona la semilla certificada.
¿Sabías que el uso de semilla de curso no legal puede sancionarse gravemente? Consulta con APROSE y asegura la legalidad de tus cultivos. Imagen: Pixabay.
Los riesgos de la semilla de curso no legal
El uso de semilla de curso no legal, obtenida sin control ni autorización, representa una mala praxis agrícola, con las siguientes consecuencias:
Impacto en el rendimiento y calidad del cultivo
- Aumento de los riesgos de plagas y enfermedades, ya que no se someten a tratamientos fitosanitarios.
- Pérdida de homogeneidad y calidad en las cosechas.
Consecuencias legales
- El uso y comercialización de semilla de curso no legal está prohibido en España, constituyendo una infracción administrativa sancionada con multas.
- Puede generar conflictos relacionados con la propiedad intelectual en el caso de variedades protegidas.
Perjuicio para la innovación agrícola
- Las prácticas ilegales afectan a los obtentores y productores de semilla, desincentivando la inversión en innovación y desarrollo de nuevas variedades.
En APROSE trabajamos para sensibilizar al sector agrícola sobre la importancia de la semilla certificada, no solo como garantía de calidad, sino también como una herramienta para asegurar la sostenibilidad y legalidad de la producción.
👉 Recuerda: el uso de semilla certificada no solo es una buena práctica agrícola, sino también un compromiso con el futuro del sector. ¡Elige la calidad y tranquilidad!
Webgrafía consultada